Ir al contenido principal

#226 Sedes Sapientiae

Este pesebre me lo regalaron mis padres en agosto de 2017. Lo compraron en la santería de Nuestra Señora del Carmelo, en Buenos Aires, pero fue hecho en China y es de la marca Montefiori. Es una única pieza, en resina, con las figuras de la Sagrada Familia: san José sostiene un farol y abraza a María, que sobre su falda tiene sentado al Niño Jesús.
La imagen de María que en su regazo tiene sentado al Niño fue en el arte religioso medieval una representación muy popular de la Virgen como "sedes Sapientiae", o "trono de la Sabiduría". Con el correr de los siglos, el arte siguió representando esta figura, aunque dándole mayor movimiento, con gestos de ternura maternal, como en este pesebre, en el que la Virgen sostiene la mano del Niño y le mira con suma dulzura.
Jesús es la Sabiduría encarnada y María, su trono.
Dice san Luis María Grignion de Montfort, en "El amor de la Sabiduría eterna", que un deseo ardiente, oración continua y mortificación son tres medios para adquirir la sabiduría divina, pero, afirma, el gran medio y mejor secreto para adquirirla y consrrvarla es una "tierna y verdadera" devoción a la Santísima Virgen, que es "la madre, la señora y el trono de la divina Sabiduría".

María es la Señora de la divina Sabiduría, explica san Luis María Grignion de Montfort, no porque sea superior ni igual a Dios "sino porque Dios Hijo, la Sabiduría eterna, con haberse sometido en todo a María, como a su Madre, le ha otorgado sobre sí mismo un poder maternal y natural del todo incomprensible, no sólo durante su vida mortal, sino incluso en el cielo, ya que la gloria no destruye la naturaleza, sino que la perfecciona" en virtud de lo cual "Jesús en el cielo es, más que nunca, Hijo de María, y María, Madre de Jesús".
En este sentido, destaca el santo francés, "María tiene autoridad sobre Él, y Él, en cierto modo, le está sumiso, porque así lo ha querido; es decir, que María, por su poderosa oración y gracias a su divina maternidad, obtiene de Jesús todo cuanto quiere, lo da a quien quiere y le engendra todos los días en las almas que ella quiere".
"¡Oh cuán dichosa es el alma que ha logrado el favor de María! Puede tener la seguridad de poseer muy pronto la Sabiduría, pues como ésta ama a los que la aman, les comunica a manos llenas sus dones, especialmente el bien infinito que encierra todos los demás, Jesús, fruto de su vientre", explica el santo.
En María, "trono real de la Sabiduría eterna", muestra la misma Sabiduría sus grandezas, exhibe sus tesoros y pone sus delicias. "No existe otro lugar en el cielo ni en la tierra donde la Sabiduría eterna derroche tanta magnificencia y se complazca tanto como en la incomparable María", afirma san Luis María Grignion de Montfort.




Comentarios

Entradas populares de este blog

#254 Un ajuar para el Niño

Este Niño precioso me lo regaló mi amiga Annie Calzia en julio de 2018. Lo trajo de Santiago de Chile y por eso acudí a Teresa de los Andes (1900-1920), carmelita chilena canonizada en 1993, para escribir estas líneas. En una de sus cartas a su prima Herminia Valdés Ossa, Teresa le da algunos consejos para vivir el tiempo de Adviento, que está a punto de empezar. "Prepárate para Navidad. Piensa todos los días en Jesús que, siendo Dios eterno, nace como un tierno Niño; siendo Todopode­roso, nace pobre, sin tener con qué resguardarse del frío. Necesita de su Madre para vivir, siendo Él la Vida", le escribe a su prima, a quien llamaba cariñosamente "Gordita". Y a continuación le hace una "lista" para que le prepare un "ajuar" al Niño Jesús: "Camisitas para abrigarlo: cinco actos de amor diarios y deseos de recibirlo en la Comunión. 'Jesús mío, ven a mi pobre corazón, que sólo desea latir por Ti'. Mantillas para envolverle sus pi

#275 El pozo de Belén

Este pesebre me lo regaló en mayo de 2019 mi amiga Daniela Temelini. El nacimiento fue hecho por la hermana de Daniela, carmelita descalza del Monasterio Santa Teresa de Jesús, de Buenos Aires. Cuando lo vi, lo que más me llamó la atención fue un aljibe al costado del pesebre. ¿Qué hace un pozo de agua allí? Lo curioso es que en Belén no hay uno sino tres pozos de agua históricos, cisternas cavadas en la roca, a poca distancia de la iglesia de la Natividad. Son los pozos del rey David, asociados al episodio de los tres valientes soldados que irrumpen en el campamento de los filisteos para buscar agua, narrado en el segundo libro de Samuel y el primero de Crónicas: "Estos tres, los más valientes de los treinta, bajaron juntos donde David, a la caverna de Adulam, en el tiempo de la siega, mientras que una tropa de filisteos acampaba en el valle de Refaím. David estaba en el refugio y había en Belén una guarnición filistea. Se le antojó decir a David: '¡Cómo me gustaría be

Niños invitados #39: Los "Manuelitos" de Mama Antula

En agosto de 2016 tuve la oportunidad de visitar la Santa Casa de Ejercicios Espirituales, de Buenos Aires, faltando pocos días para la beatificación de la fundadora de este sitio histórico, María Antonia de Paz y Figueroa . Conocida popularmente como Mama Antula, María Antonia nació en la provincia argentina de Santiago del Estero en 1730, cuando aquel territorio dependía del Virreinato del Perú. A los 15 años hizo votos de pobreza y castidad, adoptó el nombre de María Antonia de San José y, junto a otras compañeras, bajo una forma de vida consagrada conocida entonces como "beaterio", se dedicó a asistir a los jesuitas en su labor pastoral y social, en particular en los Ejercicios Espirituales de san Ignacio de Loyola. La figura de Mama Antula se hizo conocida gracias a su empeño por mantener vivo el carisma ignaciano luego de que en 1767 el rey español Carlos III decretara la expulsión de los jesuitas de sus territorios, lo que la movió a recorrer varias provincias del n